Seguramente ya te habrás dado cuenta que casi no se ven bicicletas con ruedecitas para aprender a montar en bici como las que tú tenías cuando eras pequeño/a.
El motivo es que ahora casi tod@s l@s niñ@s aprenden a ir en bici con bicicletas sin pedales.
En los últimos tiempos, se ha demostrado que las bicicletas sin pedales son mucho más beneficiososas para aprender a ir en bicicleta ya que potencian que tu hij@ sepa mantener el equilibrio casi sin darse cuenta y así el paso a la bicicleta grande es mucho más suave y confortable para ellos.
¿Recuerdas la sensación cuando empezaste a ir en bici con una bicicleta grande y le decías a tu padre o a tu madre “agárrame, no me sueltes”? ¡Y de golpe te dabas la vuelta y detrás no había nadie! Los primeros momentos de ir en una bicicleta grande normalmente iban acompañados de tembleque de manillar, de miedo, de poco equilibrio, de mucha inseguridad y algunas caídas…
Pues todo esto desaparece – o se minimiza mucho – con una bicicleta sin pedales.
La bicicleta sin pedales anima a tu peque, a partir de 1 año, a moverse de un lado para otro sobre dos ruedas y correr rápido hacia adelante. Cuando ya se sienta más seguro y domine mejor su capacidad motora, verás que empezará a sentarse y levantarlas piernas para dejarse llevar por una calle con un poco de pendiente o para disfrutar de la inercia del impulso con las dos piernas.
Y aquí es donde se produce la magia: mientras está sentado después de haberse impulsado, está aprendiendo a mantener el equilibrio de forma totalmente natural. Y este es el equilibrio que después necesitará para llevar una bicicleta grande con pedales.
Por eso un niños o una niña que juega desde pequeñ@ con una bicicleta sin pedales no necesita después una bici con ruedecitas, sino que directamente pasa a una bicicleta grande con pedales y ya no tiene que aprender a mantener el equilibrio, porque es algo que lleva haciendo de forma natural durante años.
Cuando se ponga en una bicicleta grande tendrá que aprender a pedalear, pero este proceso es mucho más fácil porque ya cuenta con la seguridad de saberse segur@ encima de la bici de dos ruedas, sin miedo a caerse o a no saber cómo dar la vuelta o usar el manillar.
Las bicicletas sin pedales evolutivas son una gran idea
Existen muchas bicicletas sin pedales y por supuesto a nosotros las que más nos gustan son las de madera. Óbviamente porque su diseño es precioso pero también porque son muy resistentes, totalmente ergonómicas y ponen a nuestros peques en contacto con materiales naturales como la madera, mucho más agradables que el frío aluminio o el áspero plástico.
Una idea que nos parece súper interesante son las bicicletas sin pedales evolutivas. Se trata de una bici que tu hij@ puede empezar a usar a partir de 1 año, casi como si se tratara de un correpasillos, pero que luego se puede ir modificando según va creciendo para que se adapte a su estatura y pueda ser una maravillosa bicicleta sin pedales.
La bicicleta sin pedales Trybike es una de estas bicis evolutivas. A partir de 1 año o aproximadamente hasta los 2, tiene la forma de un triciclo bajo por lo que ayuda a tu hij@ a aprender a caminar con seguridad como si se tratara de un correpasillos, ¡pero mucho más divertido y para ir por el exterior!.
Entre los 2 y los 4 años, tan solo quitando una de las ruedas posteriores, se transforma en una bicicleta sin pedales baja, ideal para esta etapa madurativa y para que tu peque vaya aprendiendo a mantener el equilibrio sobre dos ruedas.
Cuando tu hijo ya tiene unos 4 años, es el momento de darle la vuelta al chasis de la bicicleta y transformarla en una bicicleta sin pedales alta, ya que el asiento sube hasta 50 cm. De esta forma, tu peque podrá ir a todas partes con su bicicleta a la altura perfecta aproximadamente hasta los 6 años de edad, momento en que ya podrá usar una bicicleta grande con total seguridad.
La Trybike ofrece una quarta posición en la qual a la bicicleta alta se le añade de nuevo la segunda rueda posterior y de esta forma, tu hij@ dispondrá de un maravilloso triciclo alto. Esta posición es muy interesante para aquellos niños o niñas que necesitan un extra de seguridad o que tienen dificultades para mantener el equilibrio, y ¡por supuesto también para todos aquellos que prefieren el triciclo a la bicicleta!
Las bicicletas sin pedales de madera están fabricades con materiales de alta calidad que las hacen muy resistentes, así que no hay problema en ir con ellas a todas partes. Pero al igual que con las bicis de plástico o aluminio, es siempre recomendable no guardarlas en el exterior, ya que las inclemencias del tiempo (sol, lluvia, aire) se degradarían rápidamente.
Si tu peque todavía no tienen una bici, nuestra recomendación es que apuestes por una bicicleta sin pedales, se lo pasará en grande con ella y te aseguras que estás potenciando su equilibrio, seguridad y autoestima.
¿Ya conoces este tipo de bicicletas? ¿Qué te parecen? Nos encantaría ver tus comentarios aquí debajo.