Este es el 2º artículo de una serie en la que compartimos ideas, materiales y juguetes que ayuden a desarrollar en casa aprendizajes para niñ@s de 3 a 5 años.
Lo hemos hecho basándonos en los objetivos curriculares de la etapa de educación infantil (P3, P4 y P5) y este segundo artículo se centra en las capacidades vinculadas al descubrimiento y a la experimentación.
Si quieres ver el índice con el resto de artículos, puedes hacerlo siguiendo este enlace.
La curiosidad es un motor de aprendizaje y es algo innato en tu hij@ desde su nacimiento.
Esta curiosidad es la que hace cada día se interese por todo lo que sucede a su alrededor y quiera tocarlo todo, verlo todo, preguntarlo todo…
Es gracias a la curiosidad que tu hij@ entra en contacto con el mundo que le rodea y esta experimentación con el entorno físico es la que le ayuda a comprenderlo.
Seguro que te ha pasado alguna vez, vas caminando y de repente tu hij@ se para a observar cómo una hilera de hormigas atraviesa la acera de un lado a otro, llevando migas de pan o trocitos de hojas.
Tú tienes prisa y le dices “venga, vamos”, pero él/ella ni se inmuta, no quiere moverse de allí, está absolutamente embelesado mirando las hormigas.
La mayoría de los adultos no nos paramos a observar las hormigas, pero para tu hij@ se trata de un momento casi mágico en el que suceden muchas cosas que le interesan: ¿por qué van todas en fila? ¿a dónde van? ¿cómo pueden llevar trocitos de pan si son tan pequeñas? ¿se comerán el pan? ¿dónde lo llevan? ¿cómo saben el camino? ¿son todas iguales?
Infinidad de preguntas gracias a su innata curiosidad y a la experimentación y observación de su entorno. Y ahí es donde se dan multitud de aprendizajes.
Jugar para jugar y para aprender
Jugar es la actividad más importante que hace tu hij@ a lo largo del día. A veces los adultos pensamos que juegan para entretenerse pero no es así. El juego es el medio a través del cual tu hij@ adquiere nuevos conocimientos y aprendizajes y mediante el cual crece y va forjando su personalidad en los primeros años de su vida.
Por eso es muy importante prestar atención a los juguetes y materiales que pones a su alcance para que desarrolle un juego de calidad con el que se divierta a la vez que adquiere nuevas capacidades.
Mientras tu hij@ juega explora y descubre su entorno. Y uno de los mejores materiales para hacerlo es el Arco iris de madera de inspiración Waldorf.
Se trata de un material de juego libre compuesto por 12 piezas con los colores del arco iris – en tonos vivos, pastel o de madera natural –.
Aparentemente parece un material muy sencillo pero en las manos de tu hij@ se transforma en una propuesta de juego con infinitas posibilidades y muchos beneficios pedagógicos.
Con este arco iris de madera tu hij@ podrá hacer increíbles construcciones y equilibrios, representando formas de la naturaleza como por ejemplo una flor o una montaña, o inventando otras que a él/ella se le ocurran.
Combinado con otros materiales como por ejemplo los semicírculos se transforma en un material para construir casas y favorecer el juego simbólico.
También lo podéis usar como material de manipulación y experimentación para identificar colores y formas, y buscar por ejemplo cosas en casa que tienen ese color y ponerlas todas juntas en su arco correspondiente.
Si ponéis los arcos uno al lado del otro construiréis un túnel por el que pueden pasar coches o esconderse muñecos y que también servirá para trabajar los conceptos relacionados con el espacio – arriba, abajo, a la derecha, a la izquierda –.
Es un material de juego increíble con el que tu hij@ se divertirá y aprenderá durante horas tanto si tiene 3 años como si tiene 10, ya que las opciones de construcción y juego no terminan nunca.
Este Arco iris está construida con madera que proviene de bosques de gestión sostenible y fabricado de forma artesanal, con acabos totalmente naturales para garantizar su durabilidad.
>> Ver Arco iris waldorf grande pastel grimms
Mente curiosa y despierta
Tu hij@ tiene una mente curiosa llena de ideas y es responsabilidad de todos los adultos que estamos a su lado alimentar esta curiosidad y favorecer que tenga una actitud despierta y activa sobre lo que sucede a su alrededor.
La mente de tu hij@ está siempre en ebullición, prestando antención a lo que sucede, a lo que oye, a lo que ve, para entonces realizar sus propias hipótesis y pensamientos y a partir de ahí adquirir nuevos conocimientos y aprendizajes.
Una forma de favorecer que tu peque tenga una mente curiosa y activa es mediante la realización de mandalas con figuras de madera de distintas medidas y colores.
La palabra “mandalda” proviene del sánscrito y significa “círculo sagrado”. Los mandalas son representaciones de la realidad en forma de círculos que han sido utilizados por distintas culturas a lo largo de los siglos.
Crear o pintar un mandala es una forma de favorecer el encuentro con un@ mism@ y tiene muchos beneficios para tu hij@: favorece la concentración y la atención plena, facilita el equilibrio, aporta paz y serenidad y desarrolla la creatividad, entre otros.
Todas estas capacidades están estrechamente ligadas con el desarrollo de una mente curiosa y despierta, por eso nos encanta jugar con los mandalas de madera de Grapat.
Se trata de distintos sets con pequeñas figuras de madera de diferentes colores: piedras grises, abetos verdes, conos naranjas, gotas de agua azules, huevos lilas, flores rosas, setas marrones, colmenas amarillas, conos verdes, monedas azules y formas de fuego de color rojo.
Tu hij@ puede combinar uno o varios de estos sets para construir los mandalas que se le ocurran y también puede usar en sus creaciones otros materiales que tengáis en casa: granos de arroz, lentejas, botones, etc.
El ejercicio de hacer mandalas es muy interesante porque en un primer momento tu hij@ tendrá delante suyo una mesa o el suelo vacío y de repente, cuando empiece a colocar las disitintas piezas, todo empezará a coger forma y sentirá la creatividad fluir de su pensamiento para crear maravillosas creaciones en forma de círculo.
Otra opción para hacer mandalas es este puzzle de madera que incluye distintas tarjetas con propuestas de mandala para que le sirvan de guía a tu hij@ en sus primeras creaciones.
Es interesante como introducción a los mandalas y para tener unas primeras ideas y para que después él/ella puede hacer sus propias creaciones.
Hacer mandalas es una actividad que tu hij@ puede realizar desde los 3 años y en adelante y que os traerá muchos momentos de aprendizaje y diversión familiar ya que a los adultos también nos encanta hacer mandalas.
Además es una actividad que aporta tranquilidad y sosiego y que permite que su mente y pensamientos se desarrollen a su propio ritmo y según sus intereses.
>> Ver Mandalas de Grapat y puzzle mandala
Detrás de la exploración del mundo que realiza tu hij@ cada día hay una intencionalidad.
Constantemente se plantea hipótesis y realiza distintos experimentos para ver qué sucede y así adquirir nuevos conocimientos.
En cada etapa de su desarrollo, la exploración y experimentación con el entorno es distinto pero el esquema siempre es el mismo: algo despierta la curiosidad de tu hij@, le gustaría saber qué es o cómo funciona, realiza alguna acción o intervención en ese fenómeno que le ha llamado la atención y entonces comprueba si lo que pensaba es correcto o no y a partir de ahí adquiere un nuevo conocimiento.
Estos experimentos constantes moldean su conociemiento sobre el mundo y le ayudan a desarrollar el razonamiento y comprensión de lo que pasa a su alrededor.
Un material que nos encanta para favorecer esta capacidad es el set de niños, casas y árboles de dëna.
Se trata de distintas figuras de silicona de grado alimentario con las que tu hij@ podrá experimentar y jugar durante horas.
Por un lado, dëna le ofrec a tu peque la oportunidad de ver que no todo es lo que parece. Así, la figura con forma de casa, al darle la vuelta y girarla sobre si misma, se transforma en una nube, y la figura en forma de niño/a se transforma en otro niño o niña diferente.
Es una forma de vivir en primera persona el poder creativo para dar forma y moldear nuestro entorno con nuestros pensamientos y acciones.
Dëna es también un material ideal para hacer equilibrios y construcciones. Tu peque puede intentar hacer torres apilando los distintas figuras y ver cómo tiene que irlas encajando para que se aguanten o para crear formas geométricas o inventadas.
A la vez, como es de silicona y no está relleno por detro, es un material de juego abierto que ofrece muchas otras opciones como por ejemplo jugar con él en la bañera o usarlo como contenedor para clasificar otros materiales pequeños que tengáis en casa.
Otra cosa que nos encanta de dëna es que como la silicona es de grado alimentario se puede usar también como molde para hacer galletas y se puede poner en el horno con total seguridad.
Como ves es un jugeute abierto super completo con el que tu peque aprenderá muchísimo mientras lo manipula y experimenta con él a su ritmo.
>> Ver Dëna kids + dëna houses + dëna trees
Representar y comunicar para entender el mundo
La acción de representar el mundo que le rodea es imprescindible para que tu hij@ lo comprenda y adquiera nuevos aprendizajes y conocimientos.
Para representar algo, por ejemplo un dibujo sobre un papel, primero tu peque tiene que haber vivido una experiencia y después será capaz de hacer una representación de esta.
Es la clásica actividad que se realiza en la escuela al volver de vacaciones o al volver del fin de semana, donde se le pide a tu hij@ que dibuje algo que ha hecho en esos días o algo que le gusta mucho.
Para realizar ese dibujo tu hij@ pone en marcha una gran cantidad de capacidades mentales: por un lado, recordar qué es lo que ha hecho, dónde ha estado y con quién, compararlo con otras vivencias, escoger la situación, lugar o momento que quiere dibujar y entonces hacer el dibujo, que es la representación de la situación vivida.
Parece muy sencillo pero en realidad no lo es.
Una forma de favorecer esta capacidad es por ejemplo jugar con una cocinita de madera.
Podéis jugar a hacer distintas comidas y de esta forma hablar sobre los alimentos y sobre cómo se cocinan.
Verás la increíble imaginación de tu hij@ cuando te proponga hacer sopa de naranja o un pastel de pollo con tomate, ¡todo es válido en su cocinita!
Para favorecer su capacidad de representación podéis crear vuestra propia carta de restaurante y dibujar los distintos platos que se pueden pedir, para después crealos en la cocina.
Según la edad de tu hij@, esta representación puede ser con dibujos o mediante la escritura, favoreciendo así también la lecto-escriptura.
Jugar a cocinitas es una actividad de juego simbólico con la que tu hij@ también desarrolla su imaginación, por lo que además de potenciar las capacidades relacionadas con la comprensión de su entorno, también enriqueces su mundo interior.
>> Ver Cocina de sobremesa 2 en 1
Esperamos haberte inspirado con estos juguetes y actividades para realizar en casa y favorecer el aprendizaje de conocimientos a través de la exploración y el descubrimiento.
Nosotr@s seguimos enviando pedidos cumpliendo con todas las medidas de seguridad, por lo que si te interesa algun juguete, podemos enviártelo a tu domicilio.
Mañana publicaremos una nueva entrega de esta serie sobre juguetes que favorecen aprendizajes valiosos del currículum de educación infantil (P3, P4 y P5), gracias por leernos y por compartir.