Los cumpleaños infantiles son uno de los eventos donde se respira mayor ilusión. Este día, es esperado con muchísimas ganas, tanto por el cumpleañero como por sus invitados. Y es que, saben que hay algo que no va a faltar: la diversión.
Mientras que los papás se preocupan por la tarta, la merienda, el lugar… los niños solo piensan en jugar, jugar y jugar. Por ello, tenemos que estar preparados y disponer de una larga lista de opciones de juegos para que, la fiesta, no decaiga ni por un segundo.
Es en este tipo de celebraciones donde poner toda tu imaginación y creatividad a trabajar para tener las mejores ideas de juegos para fiestas de cumpleaños infantiles. Pero, lo sabemos, no siempre estamos inspirados.
Así, para que los juegos para niños en un cumpleaños infantil estén más que asegurados, te proponemos una buena lista de divertidos juegos con los que estarán entretenidos y felices, mientras que, los papás, podéis relajaros viéndolos disfrutar.
A continuación, te presentamos los mejores juegos para cumpleaños infantiles.
La silla
Porque los clásicos nunca mueren, ¿quién no se lo ha pasado en grande jugando a este juego?
El juego de la silla pone a prueba los reflejos de los niños y su capacidad de reacción. Además, potencia enormemente la concentración y agudiza el oído a niveles insospechados.
Es una forma ideal de amenizar los cumpleaños ya que es un juego que sí o sí, ha de tener música. Elegid una canción y ponerla a reproducir. Mientras suena la música, los niños, caminan en círculos alrededor de las sillas que habremos dispuesto.
Podemos comenzar con el mismo número de sillas que de niños, a fin de que se familiaricen con la dinámica del juego. Para la música, y los niños corren a encontrar una silla vacía en la que sentarse.
Tras una primera ronda en la que todos se han sentado, empieza otra, pero, esta vez, con una silla menos. El niño o niña que se quede sin silla, tendrá que esperar una nueva partida.
Yincana
Los juegos de Yincana son de lo más divertidos, además de aportar numerosos beneficios a los niños. Se trata de una serie de pruebas que han de ir superando para llegar al “tesoro final”.
Se trata de un juego en equipo, en el que, los niños, desarrollan sus habilidades comunicativas, el trabajo en equipo e, incluso, dotes de liderazgo. Claro está que, por encima de todo, hay que resaltar los valores de compañerismo y la capacidad de escucha entre todos los miembros del grupo.
Además, para hacerlo más divertido, puede ser una Yincana tematizada con algo que le encante al cumpleañero o cumpleañera. Por ejemplo, los piratas.
Para realizar este juego, habrás de prepararlo con antelación. Esconde una serie de pruebas en casa, las cuales, los niños han de resolver para pasar a la siguiente. Pueden ser acertijos, adivinanzas, puzzles de pequeño tamaño, tangram… Resolver la prueba les dará una pista para llegar a la siguiente.
Al final, se encontrarán con el premio o recompensa, que puede ser una bolsa de chucherías.
¡Quemado!
Otro de los juegos más típicos – y divertidos – de la infancia es el quemado. Para jugar a este juego necesitaremos, simplemente, una pelota de plástico o una blanda de espuma.
Todos los niños, menos 2, se ponen en el centro. Los dos restantes se colocan en los laterales, cortando el paso al resto de niños. Uno de ellos lanza la pelota e intenta dar con ella a alguno de los niños del centro. Estos, han de apartarse pues, si la pelota les da en el cuerpo… ¡quemado! Y abandonan el área de juego.
¡Eso sí! Si atrapas la pelota cuando te la lanza el rival, puedes rescatar a uno de tus compañeros “quemados”.
Si la pelota no da a ninguno de los niños, es lanzada por el jugador situado al otro lado.
Se trata de un juego muy dinámico y beneficioso para los niños, ya que promueve la práctica de ejercicio físico y agudiza los reflejos. Es importante que, al comienzo del juego, se establezcan unas normas básicas:
- El balón no se lanza a la cara
- No podemos salir del área de juego
La momia
Viajamos hasta el Antiguo Egipto donde tendremos que convertir a uno de nuestros amigos en una momia.
Este juego consta de dos o más equipos – en función de los niños que haya – y pone a prueba la rapidez y, sobre todo, la destreza de los pequeños. Para jugar, necesitaremos papel higiénico y unos nervios de acero.
El planteamiento es fácil. Tenemos que envolver a uno de los miembros del equipo en papel higiénico, como si fuera una momia, antes que el resto de equipos. Sencillo, ¿verdad? La dificultad está en que, el papel higiénico, no puede romperse. Si ocurriera, vuelta a empezar de 0.
Por ello, en este juego, más que rapidez, hay que ser muy cuidadoso. Al finalizar el juego, podéis haceros divertidas fotos con vuestra momia particular.
Carreras con huevos
De nuevo, un juego por equipos que pondrá a prueba la concentración, cuidado y habilidad de los pequeños. Eso sí, ¡pasándoselo genial!
Formamos dos o tres equipos, que dispondremos por filas. Imaginemos que los equipos son de 4 personas cada uno: dos miembros del equipo se sitúan a un lado del área de juego y, los otros dos, enfrente, a una distancia suficiente para darle emoción a la prueba.
La carrera con huevos consiste en recorrer el camino alcanzar a tu compañero de equipo, mientras sujetas un huevo en una cuchara. Has de ir todo lo rápido que puedas, pero sin que el huevo caiga al suelo. Si lo hace, volvemos al punto de partida y empezamos de nuevo.
¡Guerra de globos!
¿Cumpleaños en los meses de verano? Con este juego los niños se lo pasarán en grande durante un buen rato. Además de terminar la mar de fresquitos.
¿Qué necesitaremos para este juego? Muchos globos, agua y ropa seca para que los niños se cambien.
La guerra de globos de agua encanta a pequeños y, también, a grandes. Más de un padre acaba animándose y tirando un globo de agua a otro padre despistado. ¡Las risas están aseguradas!
Pdta.: Siempre hay sitio para pistolas de agua.
Estos son solo algunos juegos con los que pasar un cumpleaños infantil de lo más divertido. Además de esto, el escondite, los “polis y cacos” o el pollito inglés, son algunos de los clásicos que nos acompañarán generación tras generación, y que siempre triunfan.